La Volta a Portugal llegó a la sexta etapa que, a priori, iba a ser una jornada de transición por los primeros 70 kilómetros llanos y las cotas finales que presentaban menor dificultad que en días anteriores. Pese a ello, la realidad superó la previsión y las altas temperaturas, sumadas al elevado ritmo, fraguaron una etapa muy dura. Pronto, varios ciclistas se marcharon por delante de un pelotón que rodaba a velocidad crucero y, visto el resultado de ‘Chupe’ el día anterior, el Burgos BH no podía quedarse expectante. Isaac Cantón se filtró en este corte y el pelotón concedió una amplia ventaja a la cabeza de carrera que alcanzó los 10 minutos y medio.
Durante la ascensión a Geraz do Minho, a 35 kilómetros de la línea de llegada, se rompió el entendimiento en la fuga y Cantón quedó bloqueado en el grupo perseguidor. Tras más de 17 kilómetros intentando cazar, el manchego logró conectar con la cabeza de carrera. Pero, poco después, durante la subida a Golães, volvieron los ataques para defender intereses individuales y la escapada inicial quedó dividida en pequeños grupos. En meta, Isaac Cantón terminó undécimo para prevalecer la actitud luchadora del equipo y la buena tendencia de resultados.
Una vez finalizada su andadura, Isaac Cantón comentó que “ha sido una escapada otra vez dura. (Juan Felipe) Osorio ha tapado un par de huecos y cuando he arrancado yo se ha conformado la fuga. Hemos ido todo el día rodando rápido y se notaba que venía gente muy buena. De cara al final esperaba estar un poco mejor pero aun así estoy alegre por haber podido entrar en esta escapada y pelear por la etapa. He dado todo lo que tenía”, afirmó.
El sexteto burgalés continúa mañana con la etapa más larga de la ronda lusa, que recorre más de 193 kilómetros. El séptimo capítulo de la Volta aumenta la intensidad de las dificultades montañosas a medida que se dirige a la meta en Bragança con un total de cuatro puertos puntuables.
