Exhibición de Hugo de la Calle en un Tro-Bro Léon pasado por agua
El Burgos Burpellet BH regresará a Francia esta semana para disputar tres carreras de un día en la región de Bretaña. Serán carreras muy variadas, aptas para velocistas, clasicómanos y puncheurs. El jueves 8 de mayo comenzará este triplete con los Boucles de l'Aulne-Châteaulin, cita en formato de circuito y plagada de repechos a la que el equipo morado regresa por primera vez desde 2021. Un día después, los burgaleses debutarán en el Tour de Finisterre, carrera marca de la casa de la Copa de Francia, plagada de pequeñas cotas en su recorrido. Tras un día de descanso, el domingo 11 llegará la más exigente de las tres pruebas: el Tro-Bro Léon. Uno de los recorridos más llamativos del calendario internacional debido a sus 29 tramos de tierra y en el que los morados ya acumulan cuatro participaciones.
Hugo de la Calle se estrenó en las clásicas francesas de primavera de la mejor forma posible, acabando 14º en una de las ediciones más duras del Tro-Bro Léon. El asturiano entró en la escapada y se desenvolvió a las mil maravillas en los caminos de tierra, seña de identidad de la prueba bretona. En una carrera marcada por las continuas lluvias, el joven ciclista de 20 años se marchó en solitario en los embarrados ‘ribinoù’ y peleó con los más fuertes del pelotón una vez le dieron caza. Además, subió en dos ocasiones al podio en Lannilis, como ganador del premio de la combatividad y del premio de los sprints intermedios.
El triplete de clásicas en la Bretaña francesa comenzó para el Burgos Burpellet BH el pasado jueves, con los Boucles de l’Aulne. Los morados dieron la cara desde la escapada, al entrar George Jackson en un grupo que se formó de salida y que pronto alcanzó los cinco minutos de ventaja. El neozelandés aguantó por delante hasta la última vuelta al segundo de los circuitos, cuando se descolgaba en el duro asenso a Menez Quelerc’h.
El pelotón fue perdiendo unidades en cada giro en torno a Châteaulin y tres morados se mantenían entre los más fuertes de la carrera: Antonio Angulo, Clément Alleno y Sergio Chumil. El guatemalteco se mostró atento a los cortes en las últimas vueltas, pero todo se decidió al sprint, donde el cántabro fue el mejor de los morados.
Un día después, el equipo morado disputó por primera vez el Tour de Finisterre. No tomó la salida como estaba previsto Daniel Cavia por enfermedad, siendo sustituido por Jackson. Los burgaleses animaron el tramo final de la carrera y, tras un primer intento en solitario de Hugo de la Calle, fue Sergio Chumil quien entró en varios cortes peligrosos. El guatemalteco se filtró primero en un grupo de unas 15 unidades en el que no acabó de haber organización en los relevos.
Chumil lo volvió a intentar unos kilómetros después, con otro acelerón que tampoco llegó lejos ante el empuje del pelotón. Dentro ya de la última vuelta al circuito final, Ángel Fuentes y Hugo de la Calle entraron en un grupo de atacantes y el asturiano realizó su apuesta lejana, acelerando con fuerza en un repecho a seis kilómetros de la meta. Sin embargo, fue atrapado y la carrera se resolvió en una volata, donde Sergio Chumil, Antonio Angulo y el propio De la Calle fueron los primeros morados.
El Burgos Burpellet BH descansó el sábado y pudo preparar la exigente cita del domingo, el Tro-Bro Léon. La carrera bretona partió de Lannilis bajo una intensa lluvia que endureció toda la carrera. Tras una primera hora de continuos ataques, Hugo de la Calle logró entrar en la fuga definitiva de siete ciclistas. El asturiano afrontó de esta manera con ventaja los primeros de los 29 tramos de tierra que integraban la prueba, convertidos en barro por la lluvia. Una imagen más propia del ciclocross, disciplina que no es ajena al asturiano, que ya fue cuarto en el Campeonato de España sub-23 de hace dos temporadas.
Las durísimas condiciones meteorológicas, sumadas a la complejidad del terreno provocaron una gran selección en el pelotón en los primeros once tramos de tierra. En la fuga, De la Calle sufría una caída que le obligaba a cambiar de bicicleta, pero no le impedía seguir al frente. El asturiano se desenvolvió a las mil maravillas en el terreno embarrado y aceleró la carrera cuando vio que el grupo principal se acercaba. Una mezcla de potencia, habilidad y valentía le permitieron aguantar por delante hasta la parte decisiva de la carrera.
En el pelotón trataban de resistir George Jackson, Antonio Angulo, Rodrigo Álvarez y Daniel Cavia, sorteando las numerosas caídas provocadas por la lluvia. El pequeño grupo de favoritos acabó alcanzando a Hugo a tan solo 30 kilómetros del final, pero el asturiano no había dicho la última palabra. Siguió peleando, atacando y entregando hasta el último gramo de fuerza para acabar en los puestos delanteros. Con los ciclistas entrando casi de uno en uno y cubierto de barro, De la Calle cruzaba la meta en Lannilis en una gran 14ª posición. Un notabilísimo estreno en las clásicas del que saca un valioso aprendizaje de cara al futuro.