Durante esta época del año, se puede disfrutar de un tiempo seco, aunque a varios enclaves no se puede acceder sin estar bien equipados

Una escapada para el último Puente Festivo del año por Pinares y El Valle

Zona de La Laguna Negra.

Una propuesta desde Asopiva para hacer un recorrido por el territorio de la zona biprovincial, entre varios espacios naturales.

Iniciamos la escapada planificada hace tiempo rumbo a la comarca de Pinares y El Valle entre Soria y Burgos. 
Buscábamos experiencias en la naturaleza con diversión en familia y encontramos este lugar, bonitos y cuidados pueblos que se ubican en verdes y montañosos paisajes interrumpidos por senderos en los que practicar deporte.
Buscábamos un lugar donde relajarnos, disfrutar de la buena gastronomía y de la naturaleza y encontramos este entorno natural inigualable, comarcas verdes pobladas por extensísimos pinares y robledales.
Después de dos días de escapada, hemos recorrido enclaves tan mágicos como el Acebal de Caragüeta, la Sierra Cebollera que guarda en sus entrañas un circo glaciar con corazón de laguna y una ascensión hasta el pico nos ha procurado unas bellas panorámicas y es cobijo de ciervos donde hemos disfrutado la berrea, la tan renombrada Laguna Negra, de aguas profundas, flanqueada por inmensos farallones de granito y contexto de la mágica leyenda de Antonio Machado. Hemos esquiado en el punto de nieve de Santa Inés, muy conocido por sus buenos recorridos para el esquí de fondo y no pudimos dejar de visitar el Parque Natural de los Circos Glaciares de Urbión, donde nace el río Duero que descansa en el embalse de la Cuerda del Pozo, donde disfrutamos de deportes náuticos, así como de la pesca.
Practicamos senderismo por el Parque Natural de El Cañón de Río Lobos, un profundo cañón calizo formado por una antigua erosión del río Lobos que recorre más de 25 kilómetros y que se inicia en la ermita de San Bartolomé que forma parte de un antiguo monasterio templario. 
En los parques de aventura “El Amogable”. ‘’Vinuesaventura’’ y “De pino a pino”, pudimos jugar sobre los árboles y cerquita estaba el Aula del Bosque y la Casa de la Madera que nos enseñó las profundidades y misterios del bosque. El recorrido por las Lagunas de Neila me permitió disfrutar de un paisaje único donde se respira y disfruta un extenso territorio forestal.
El paisaje de Pinares y El Valle se respira y disfruta, con frescor en verano y frío seco en invierno, donde huele a hierba, madera y hogar. El paisaje, sus pueblos de arquitectura popular y sus gentes, han dado forma a un conjunto de naturaleza y cultura ante el que no pudimos dejar de sorprendernos y que seguro volveremos.

www.asopiva.com

www.turismourbion.com