La Asamblea General de Delegados de Caja Rural de Soria que debería haberse realizado el 8 de mayo, se ha celebrado hoy en el Palacio de la Audiencia de la ciudad de Soria y en la misma ha sido reelegido como presidente Carlos Martínez Izquierdo.
Ha sido un acto atípico respecto al de otras ediciones y marcado por los protocolos en materia de seguridad sanitaria. La primera gran diferencia con respecto a otros años ha sido el número de delegados que han asistido al Palacio de la Audiencia. Teniendo en cuenta el aforo del centro cultural que cuenta con más de cuatrocientas butacas solo han podido ocuparse cien guardando la distancia social indicada por las autoridades sanitarias.
Otras alteraciones que ha sufrido este evento han sido que no se ha celebrado el tradicional sorteo del viaje a Benidorm y la comida de hermandad de delegados. El importe económico que fija la Caja para estos dos eventos ha sido destinado a la iniciativa solidaria ‘Soria contra el COVID-19’, que lidera la Caja junto con FOES y la Cámara de Comercio y que tiene como objetivo la compra de material sanitario y educativo para paliar los efectos de la pandemia.
Además de la aprobación de las cuentas anuales correspondientes a las cuentas individuales y consolidadas de la Entidad del ejercicio 2019 y la reelección de Carlos Martínez Izquierdo, en la asamblea también se despidio del consejo rector dos históricos de la entidad como Manuel Aldea Lallana y José Yubero García, mientras que incorporan Rosa María Gallego Gallego, Begoña Martín Asenjo y Carlos de Pablo Ortega.
El director general de la Caja, Domingo Barca, presentó os datos financieros de la entidad resaltando como “resultados históricos” los obtenidos en el ejercicio 2019, que han aportado más solidez económica a la eEntidad, obteniendo un resultado neto superior a 12 millones de euros, lo que supone un incremento del 15,73 por ciento respecto al año 2018. Asimismo, los depósitos crecieron un 8,96 por ciento y los préstamos y anticipos a clientes un 6,75 por ciento.
Oficinas
Además, el director general destacó que para obtener estos resultados, la Caja ha seguido impulsando su plan de expansión a provincias limítrofes. En el año 2019 se sumaron dos oficinas más en La Rioja. A 31 de diciembre de 2019, la red de Caja Rural de Soria está compuesta por 53 oficinas, 36 de ellas distribuidas entre la capital y provincia de Soria y el resto en provincias limítrofes.
En este sentido, Barca destacó que “hemos abierto oficinas fuera de la provincia pero no renunciamos ni renegamos de nuestros orígenes. La provincia sigue estando en nuestra agenda diaria: 18 oficinas en Soria, en núcleos inferiores a 900 habitantes. Reforzamos nuestra apuesta por lo rural a través de nuestra unidad móvil, que da servicio financiero a las poblaciones que no disponen de oficina física”.
A su vez, también puso de relieve el panorama de la nueva forma de hacer banca a través de nuevos canales digitales que implementará el Grupo junto Rural Servicios Informáticos (RSI) en los próximos años con el objetivo de convertir a la Caja en una entidad del siglo XXI en materia digital.
Por su parte, Carlos Martínez, agradeció la confianza depositada en él para liderar la entidad en los próximos años y repaso el contexto económico y al papel de la Caja en materia de Responsabilidad Social Corporativa.
Para el máximo responsable de la entidad se trata de un proyecto ilusionante, que se lanzó hace tres años, con el objetivo de afianzar una “propuesta de valor hacia socios y clientes y con el resto de grupos de interés con los que se relaciona la Caja” .
Por último, también indicó que la entidad es consciente de otro de los cambios importantes en el siglo XXI, como es el cambio climático y su impacto en el medio ambiente. Por eso la apuesta de su Consejo Rector por las energías renovables es clara y decidida. La Caja participa junto a Naturgy, Iberdrola, Enel, Solarig en diferentes proyectos.
