La Federación de Empresarios de Hostelería de Burgos solicitó hoy a la Junta de Castilla y León la ampliación del horario de apertura de los establecimientos de hostelería hasta las 12 de la noche, señalando que se trata de una medida “necesaria y urgente”, y advirtiendo de que si no se hace, “la destrucción de empleo será mayor”.
“Se ha demostrado que el problema no es la hostelería y tampoco está dentro de los establecimientos”, subrayan, recordando que de las 16 comunidades autónomas, solo tres han establecido el cierre a las 22 horas. "Es absolutamente razonable establecer una hora que permita mantener la actividad económica mínima para la subsistencia de hoteles, bares y restaurantes”, afirman.
En un comunicado recogido por la Agencia Ical, la Federación Provincial notificó su postura tras la aprobación de las nuevas medidas adoptadas por el Gobierno regional. En el escrito critican la decisión de restringir las salidas y entradas de la capital, así como el “cambio de criterio a los tres días”, que ha supuesto “pérdidas económicas para el sector”.
“Como otras decisiones, reafirman la mala gestión que se está haciendo de la pandemia, y ponen de manifiesto el enfoque erróneo y la improvisación de medidas que se trasladan y perjudica a toda la sociedad, no sólo a nuestro sector. El continuo cambio de criterio lo único que conduce es una mala imagen de la comunidad, de su gobierno, y unos daños extraordinarios con la consiguiente pérdida de puestos de trabajo”, denuncian.
En este punto señalan que es “rotundamente injusto” que se haya puesto el foco de atención en el sector hostelero como el problema de la expansión del virus, y añaden que las diferentes medidas que se han adoptado “no han servido para atajar el problema”, poniendo de ejemplo los confinamientos de Aranda de Duero (Burgos).
Asimismo critican que se continúen cobrando los impuestos “y no se trasladen bonificaciones o exenciones en todas las tasas e impuestos que se cobran desde las diferentes administraciones públicas, ya que la actividad económica está parada”.
Por ello, desde la Federación exigen medidas específicas de apoyo al sector como un plan de subvenciones específico. Asimismo, anunciaron que se ha acordado el desarrollo de movilizaciones que trasladen el malestar del sector burgalés, enfocadas principalmente a visibilizar el grado de afección que tiene el sector en otros muchos: agricultura, comercio, ganadería, mantenimiento, etc. Estas convocatorias se realizarán con carácter regional y sumados a las diferentes movilizaciones que se propongan desde la Confederación Regional de Hostelería de Castilla y León.
