La cofradía de San Antón, que cuenta en la actualidad con alrededor de 70 miembros, disfrutaron ayer domingo de uno de los momentos más importantes del año para todos sus integrantes: el día grande de su cofradía, San Antón.
El Mayordomo, el Prior y el párroco visontino compartieron mesa mientras el resto de hermanos disfrutó del vino, los dulces y por supuesto del tradicional y famoso pan de anisillos. “Se han hecho 80 hogazas de ¾ de kilo y 25 de dos kilos”, explican desde la panadería Carlos de Vinuesa donde cada año se elaboran estos panes, “normalmente se hacen especialmente para la cofradía de San Antón y ellos lo reparten entre los hermanos”, añade.
La tradición cuenta que solo el cura puede comer y beber en esa mesa hasta que se realiza el brindis entre los tres. Después, tanto el Mayordomo como el Prior pueden degustar los manjares expuestos. Tras el brindis se repartió el pan de anisillos entre los presentes.
Esta fiesta es organizada cada año por el Mayordomo, el Prior y los Alguaciles. Estos últimos son las dos personas que más tarde han entrado a formar parte de la cofradía.
CURIOSIDADES. Antiguamente se hacía ronda con música por las calles del pueblo. Ésta es una de las pocas tradiciones que se ha perdido en la Cofradía. Otra de las curiosidades de esta hermandad es que más de la mitad de sus componentes responden al apellido Abad. Como dato a destacar, las mujeres no han estado vetadas en ningún momento de la historia como sí ocurre en otras cofradías.
