El Subdelegado del Gobierno en Soria, Miguel Latorre analizaba en la mañana del jueves 13 de agosto, con los alcaldes de la franja soriana de la comarca de Pinares las situaciones que se viven en estas localidades durante el verano de cara a controlar la expansión del coronavirus, sobre todo en las fechas en las que tradicionalmente se celebraban las fiestas patronales de estas localidades.
Al encuentro, acudieron los representantes locales de Duruelo de la Sierra, Covaleda, Salduero, Navaleno y Vinuesa y la alcaldesa de San Leonardo de Yagüe. También participaban en la reunión el responsable en Soria de Protección Civil de la Junta de Castilla y León, Fernando Arribas con el fin de coordinar la participación de los voluntarios de Protección Civil en los dispositivos de seguridad que se organicen.
El Gobierno regional ha decidido que los amás de cien integrantes de estas cuatro agrupaciones y asociaciones de la provincia colaboren con las fuerzas y cuerpos de seguridad a la hora de informar a la ciudadanía de las obligaciones existentes para preservar la salud pública.
En el caso de que detectasen algún comportamiento irresponsable, avisarían a la Guardia Civil para que se incoase la pertinente denuncia.
ACTITUDES NO RESPONSABLES
Los alcaldes han pedido al subdelegado del Gobierno que la Guardia Civil sea estricta a la hora de denunciar puesto que están comprobando en determinados sectores de la población actitudes que están favoreciendo la expansión de la enfermedad y consideran necesarias medidas ejemplarizantes.
En el encuentro, los ediles se refierieron al “ocio nocturno” y a los “botellones”, y dado el incremento de población en los pueblos de Pinares, estas prácticas han sido más habituales durante el verano.
Latorre explicaba que, si bien después del decaimiento del estado de alarma, la labor de las fuerzas y cuerpos de seguridad fue más didáctico que coercitivo para explicar cuáles eran las nuevas obligaciones que tenía la ciudadanía, en el momento actual y dado el crecimiento de los contagios, la Guardia Civil y la Policía Nacional están denunciando todos los incumplimientos que perciben, por menores que sean.
El subdelegado ha agradecido a los alcaldes su sensibilización ante el “gravísimo problema al que nos enfrentamos” y su colaboración porque “tenemos que concienciarnos todos para no tirar por la borda el esfuerzo de más de cuatro meses de lucha”.
Los representantes municipales han coincidido en señalar que la presencia de la Guardia Civil es fundamental para combatir la expansión del coronavirus en sus pueblos porque “infunden respeto y temor a que se produzcan sanciones”.
Latorre ha abogado, además, por un incremento de las patrullas a pie puesto que resultan mucho más disuasorias a la hora de acercarse más a los grupos, y de servir de coacciones ante comportamientos no deseados.
ÁREAS EN ZONA NARANJA
Tras un mes de julio, más o menos tranquilo con la expansión del covid-19, en estas primeras semanas de agosto han aumentado los contagios de forma más destacada en las áreas de salud básica de la comarca pinariega. Este incremento, se dejó notar con la aparición de los primeros casos en la zona de Quintanar de la Sierra, y fue, posteriormente, la de San Leonardo de Yagüe, la que registraba varios focos en distintos pueblos de la zona. En la de Huerta de Rey, y en la jornada del miércoles 12 se sumaba el primer positivo desde el final del estado de alarma, en un área con gran temor por la cercanía a Aranda de Duero, población que ha vuelto a fases anteriores por la extensión de los contagios.
El número de brotes comunicados por la Consejería de Sanidad en la provincia de Soria con fecha 13 de agosto asciende a 16, con 110 casos vinculados a estos brotes, en su mayoría de carácter familiar o social. El Sistema de Vigilancia Epidemiológica está trabajando en las labores de seguimiento de todos estos brotes.
Los cuatro casos declarados en la Zona Básica de Salud de San Leonardo de Yagüe se corresponden con el brote mixto (familiar-laboral) de seis positivos informado en el día de ayer, que pasa a tener 10 casos, con cinco trabajadores de una misma empresa y cinco contactos familiares.
