miércoles. 06.11.2024
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Río Duero Soria

Toribio cree que el choque en Boiro es uno de esos encuentros que «marca cosas», ya que los sorianos todavía tienen que medirse con los principales rivales de la competición, por lo que sumar ahora es fundamental para poder afrontar dichos duelos con menor presión.

El preparador de Río Duero Soria destaca la complejidad del rival que, eso sí, jugará más presionado que los sorianos por las necesidades de puntos. Después de cuatro victorias consecutivas, la intención no es otra que enlazar un triunfo más, a pesar de que se trata de un partido difícil porque «Boiro nos va a exigir mucho», advierte. Del duelo ante Melilla, ha explicado que se produjeron «sensaciones encontradas» ya que la sensación general de todo el encuentro fue que el cuadro soriano tenía el partido controlado, exceptuando el segundo parcial, algo que «da confianza» al equipo, que, por si fuera poco, fue capaz de dar la vuelta al marcador en un escenario muy complejo.

Una remontada en la que la reacción de todo el equipo fue fundamental, al igual que la aportación de Manu Salvador. «Manu fue importantísimo. Él mete un carácter al equipo cuando está dentro de la pista y las cosas le salen bien que vienen muy bien. En partidos como el del otro día, donde el duelo se va a la épica, es importante ese carácter. La reacción fue general, todo el equipo reaccionó después del segundo set, conscientes de que tanto este set como el último de Manacor han sido los más flojos de la temporada», ha indicado.

El técnico ha destacado el trabajo de los suyos para contener a un equipo del potencial de Melilla, en un encuentro en el que Soria fue capaz de apaciguar los ánimos visitantes. Cierto es que hubo tensión en los banquillos. «A mi no me gusta la falta de respeto en la pista, protestar protestamos todos, yo el primero. El otro día se da alguna y cuando las escucho, especialmente en nuestra casa, no voy a permitir que nadie venga a faltar el respeto a ninguno de mis jugadores», ha zanjado.

Del próximo encuentro, la preparación está siendo satisfactoria. «Hemos planteado la semana como para hacer bueno en Boiro los dos puntos sumados en casa. Si en Boiro no sacamos nada, esos dos puntos se van a quedar un poco ahí. Es un partido difícil, es un rival que tiene pocos puntos en la clasificación porque ha tenido un calendario muy difícil. Se ha quitado a los cocos de encima y están en el punto de o tiran para arriba o se ponen a pensar en la zona de abajo. Creo que su sexteto titular es de garantías», comenta, aunque no cree que sea un equipo que sobresalga en nada en concreto, sino en el bloque de conjunto en general y mucha regularidad.

Toribio ha recordado que Boiro cayó 2-3 ante Teruel en su cancha, por lo que en tierras gallegas es especialmente duro. El preparador asume que Boiro puede ganar estando a un gran nivel, pero se centra en que su equipo no deje de ofrecer el nivel competitivo mostrado hasta el momento. «Es mi principal preocupación. Siempre lo planteo, vamos a hacer lo nuestro, si con eso no nos llega, habremos hecho lo que podíamos hacer», todo para que si Boiro logra la victoria, tenga que ofrecer unas prestaciones superiores a las mostradas hasta este momento, aunque es cierto es que no es fácil calibrar su potencial ya que hasta ahora se han topado con un calendario duro. «No es un equipo hecho por estar abajo, ahora comienza la necesidad y tienen más que nosotros, es algo con lo que tenemos que jugar», comenta.

El preparador celeste ha reconocido que el martes tuvo la oportunidad de charlar con Adrián Olalla después de que el canterano sufriera ante Melilla. «Le insisto en que tiene que saber gestionarlo, no es consciente ni él ni todos en general de la dificultad de cambiar de posición este año. A este nivel es muy difícil. La euforia de los tres partidos anteriores le ha hecho meterse en un nivel de exigencia que todavía no es el suyo», ha valorado.

Toribio cree que el choque en Boiro es uno de esos encuentros que «marca cosas»