Los últimos 50 kilómetros de la segunda etapa se tiñeron de morado, con el Burgos-BH tomando las riendas del pelotón principal y provocando una importante selección. En el alto de 1ª categoría previo a la subida final a Senhora de Graça se vaciaron Ángel Madrazo y sobre todo Willie Smit, arropando a un Ricardo Vilela que se situó siempre a la vanguardia del pelotón.
Un movimiento de Figueirido (Tavira) y Antunes (W52) obligó a mantenerse a la expectativa por detrás, pero ya dentro del último kilómetro antes de la línea de meta, Vilela arrancó al resto de favoritos y mostró su excelente nivel de forma que le coloca como un claro aspirante al top-10 de la Volta a Portugal. El luso fue séptimo y escala posiciones en la general hasta la 11ª posición.
Rubén Pérez: "De salida hemos filtrado a Osorio en la numerosa fuga. Pero ha sufrido un incidente, al darse un golpe en la rodilla y tenerse que descolgar. Pero sabíamos que Vilela estaba bien así que hemos trabajado y él ha respondido. Toca recuperar y pensar en mañana, que será una jornada diferente".
En efecto, este miércoles la carrera completará 172 kilómetros entre Felgueiras y Viseu con un terreno quebrado y muchas opciones para una fuga que se pueda jugar el triunfo de etapa.
